Contratar los servicios de una inmobiliaria disminuye el tiempo, las dificultades y los trámites de la venta de tu casa. Los agentes inmobiliarios se encargan tanto de las tareas esenciales que mas tiempo consumen, como de los aspectos meticulosos que un vendedor inexperto puede pasar por alto.
A la hora de vender su vivienda , algunos propietarios deciden encargarse de todo el proceso de venta. El objetivo principal de las llamadas ‘’Casas en Venta por el Dueño’’, es el ahorro de la comisión que cobran agentes o inmobiliarias por su labor, pero, en la mayoría de los casos, los riesgos de llevar a cabo este proceso solo suelen tener mayor peso que los beneficios.
Algunos de estos riesgos son:
Tomar decisiones precipitadas basadas en emociones.
Desconocimiento de las leyes.
Falta de tiempo para dedicarle al proceso de venta.
En este post os hablaremos sobre…
5 razones por las que contratar a una inmobiliaria para vender tu vivienda
1. La agencia se encarga de que la vivienda se publique al precio adecuado.
El precio es, si no la que más, una de las variantes con más influencia a la hora de la venta de un inmueble. El propietario de una casa siempre quiere conseguir el precio más alto posible, inflándolo por razones como los bonitos recuerdos vividos, los gastos pagados en reformas y decoraciones, etc.
Es entonces cuando el agente , conocedor de los factores que harán que el precio de la vivienda en el mercado fluctúe, objetivamente valorará la propiedad, siempre buscando que el cliente consiga el mayor beneficio posible con la venta.
2. El propietario tiende a ignorar los fallos de la casa
Antes de publicar una casa a la venta, se debe analizar el estado de la propiedad y limpiarla en profundidad para eliminar todo tipo de olores o manchas imperceptibles para quienes viven en la casa por haberse acostumbrado a ellos.
Los agentes inmobiliarios son expertos en saber qué hace que una casa se venda, por lo que cuando la vivienda se encuentra en su mejor estado para la venta, una visita del agente para señalar posibles cambios que atraerán a compradores puede ser muy beneficiosa.
3. El poder de negociación de la inmobiliaria es mayor que el de los propietarios
A la hora de negociar, el propietario puede ser irracional debido a las emociones ligadas con la venta, al contrario y gracias a la experiencia adquirida de la venta de cientos de casas, el agente inmobiliario conoce todos los juegos, gestos y señales que un comprador puede mostrar y como reaccionar ante ellos para llegar al mejor trato posible.
4. Llegar a una mayor cantidad de compradores
Con una lista de potenciales compradores siempre disponible y la habilidad de diferenciar rápidamente a los compradores serios, ahorrando al vendedor tiempo y trabajo, con un buen agente inmobiliario una casa puede venderse incluso antes de publicarse en el mercado.
5. Ahorro de tiempo en el papeleo
Con toda la burocracia incluida en el cambio de dueño de una vivienda, el papel del agente inmobiliario consiste en encargarse de la transacción de la manera más profesional posible, ahorrando a las dos partes del contrato el estrés de lidiar con el interminable papeleo y simplificando el proceso a una simple firma.